El gobernador Gildo Insfrán recibió en la Casa de Gobierno al medallista olímpico, Ezequiel Palacios, oriundo de San Martín 2 (Departamento Patiño), recién llegado a Formosa. Acompañó el encuentro el subsecretario de Deportes, Mario Romay (FOTO).
Palacios es un destacado integrante de la selección nacional de vóley que compitió en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, obteniendo la medalla de bronce.
Nació el 2 de Octubre de 1992. Participó en los Juegos Olímpicos de Río 2016, ganó la medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, fue medalla de plata en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Singapur 2010.
Ezequiel actualmente juega en el Montpellier de Francia, es punta receptor, y tuvo su paso por Latina en Italia donde estuvo dos temporadas.
“Es un gran orgullo para todos los formoseños y formoseñas ser representados por Ezequiel, quien llevó al podio olímpico los valores de la tenacidad, la humildad y la solidaridad que nos caracterizan como pueblo.
A través suyo enviamos un afectuoso saludo a todos los deportistas argentinos que participaron en los recientes Juegos Olímpicos, defendiendo con amor y honor los colores patrios” destacó Insfrán tras el encuentro.
“Me recibí de elite”
En contacto con la Agencia de Noticias de Formosa (Agenfor), Palacios consideró que su paso por las Olimpíadas lo consagraron como jugador de élite, al mismo tiempo que habló de una carrera sacrificada y que le llevó tiempo de esfuerzo y aprendizaje.
“No sé cómo explicarlo, lo que logramos fue una cosa extraordinaria para el país, como se está viviendo hoy en día, un momento duro. Fue un mimo para todo el deporte, para el vóley en especial” destacó.
Varias veces repitió que fue algo “extraordinario” lo conseguido como seleccionado argentino y consideró que se debió a un trabajo en equipo real, que se apoyó mutuamente.
Mostrando su medalla, “Palacete”, como se lo conoce en las redes sociales por su nombre de usuario dijo que estas olimpíadas “fueron lo máximo que he vivido con la selección, a todos los jugadores nos pasó. El trabajo fue largo, el proceso fue durísimo pero siempre con ganas de mejorar y aprender”.
Dijo que eso fue lo que lo llevó personalmente a estar hoy en la selección, y consideró que más allá del buen resultado obtenido, tomó este torneo como su consagración como jugador de elite.