BASQUETBOL
El directivo formoseño visualiza algunas cuestiones sobre puntos que serán claves para la competencia que se viene, post pandemia.
El ex basquetbolista Mario Romay, actual dirigente de La Unión de Formosa y Secretario de Deportes de esa provincia, explicó algunos detalles de la reunión que mantuvo la Asociación de Clubes con diferentes clubes de la liga, y contó todo lo que se habló de cara a la próxima temporada de la competencia.
En diálogo con el programa radial UCU Radio, el propio Romay se refirió a los extranjeros y a la Liga de Desarrollo. (Foto- Mario Romay directivo de la Unión de Formosa).
“Se ha avanzado en un montón de actividades, pero hemos tenido algunos contagiados de chicos que estaban fuera de la provincia y regresaron.
Es un contagio aislado, no hay circulación viral”, contó sobre la situación.
Y agregó: “Nos hemos juntado con Daniel Cano (DT) para arreglar su continuidad, es casi seguro que vamos a seguir con el cuerpo técnico y sumar algún entrenador para conformar el plantel. Con respecto a los jugadores, estamos empezando a averiguar, nos estamos encontrando con varios dirigentes y nadie se anima a hacer un arreglo.
Si bien pareciera que la liga comienza en noviembre, se está especulando. En la liga A se está más a la expectativa. Para mí el problema del éxodo de jugadores no es la pandemia, si no la moneda.
La pandemia está en todo el mundo, pero la moneda tan devaluada no. En Paraguay jugadores del Torneo Federal ganan 2.000 dólares por mes y acá tienen contratos de 50.000 pesos mensuales. No somos competitivos con el resto de América, porque la moneda está muy baja. Paraguay puede ser uno de los que pueda llevarse jugadores argentinos. Esto pasó en el 2000/2001 y lo que tenemos que mantener los clubes y la AdC, de la manera más seria, a la competencia. Se está viendo que haya un libre deuda para los extranjeros también por toda la situación con FIBA”.
Sobre las novedades recientes que anticipa el regreso del básquetbol de elite para el mes de octubre, Romay dijo: “Hay que establecer a fines de julio una posible fecha de inicio de la liga. Para que todo empiece a planificarse un poco, para ver qué pueden hacer, sobre todo, los jugadores y nosotros, para poder contratar o ellos asegurarse su trabajo. Contra el tema del dólar no podemos hacer nada, pero creo que vamos a tener una liga con muy pocos extranjeros, pero siempre terminamos compitiendo. Creo que tendremos una temporada de siete meses, más un mes de preparación con contratos de ocho.
Hay que poner una fecha a partir del 1 de octubre empezar a trabajar”. Y anticipó un deseo sobre La Unión: “Me gustaría jugar con nacionales, los que están en el equipo. Para mí, deberíamos continuar con varios de los que estuvieron el año pasado y darnos una revancha”.